29/3/15

Idas y venidas

Nunca es tarde para ponerse a pensar en frío, lo más helado que puedas y ver, notar, apreciar y sentir cómo han cambiado las cosas desde entonces. Da miedo, incluso vértigo todo esto. Cómo tomarse el tiempo, los meses, los días...y sí, da vértigo verte hace un año y verte ahora. Dónde estás, cómo te encuentras y con quién. Cómo te sientes o cómo te hacen sentir. Lo piensas por un minuto y todo explota, te ríes, se te escapan esas carcajadas indescriptibles que te llevan donde siempre, a ese lugar, más bien a esa sensación. Esa sensación solo tuya y tan tuya que nadie comprende, ni desearía entenderlo.Tampoco lo dejaría, ni por un momento.
Porque sí, hay veces que es imposible no poder estar bien; los míticos días grises de lluvia que, ni siquiera puedes pasarlos acompañarlos de palomitas y manta...Pero qué más da si en menos de veintitrés horas y cincuenta y nueve minutos va a ser otro día, qué importa si puedes hacer que sea distinto, porque lo será. Qué más da si te lavas la cara y miras a ese espejo que tienes enfrente, que solo tú conoces y le regalas un guiño. Qué más da, qué importa si puedes ir al revés. Puedes vestirte  de rayas rosas y azules e ir en zapatillas por estar por casa hasta allí. O puedes vestirte con tu mejor vestido para cruzar la calle y comprar folios. O salir sin rumbo y aparecer en Sol. Qué más da todo eso, si sabes quién eres tú. 

22/3/15

No ha acabado, aún no ha despegado

Dime si estarás allí cuando ya no quede nada ni nadie. Cuando lo único que esté presente sean las últimas desilusiones colgando de una mísera cuerda que se desgarra poco a poco. Cuando lo que reine sea el caos y la confusión, fieles amigas que se dan la mano. Cuando solo las nubes dominen el cielo, y sea solo eso lo que vea a través de su retina. Cuando no haya ni blanco, ni apenas gris, y todo, absolutamente sea del color del carbón. Tan negro como sus pensamientos. Se pregunta ese mismo momento en el que se da el cambio radical que, por desgracia o no, ha tenido cabida en sus pequeños y tímidos sueños. Algo que hace poco tiempo era totalmente distinto. Sí, ella reía a carcajada limpia repetidas veces hasta que la dolía la tripa, tanto cuando las cosas ibas bien como cuando iban a peor. La daba igual todo, la daba igual que lloviese, nevase, diluviase, como que cayeran zapatos del cielo...es que estaba completamente enamorada de la vida.

21/3/15

Trocitos infinitos

Nunca habla claro, nunca sabe si lo que hace o dice está del todo bien. Pero no es algo que tenga mayor importancia para ella. Sin embargo, no es capaz de hablar de lo importante o no, sino más bien de aquello que es real. Cuando habla de real no se refiere a otra cosa que no sea ser fiel así misma porque, para bien o para mal, no puede ser de otra manera. Tampoco es capaz de calificar su manera de ser, pero no debería hacerlo ni ella ni nadie. Habrá quienes lo detesten pero también a quienes los vuelva locos. Y ella eso lo sabe, aunque cueste. Pero la da igual, es consciente de que hay cosas que no se pueden cambiar ni ahora ni nunca, ni esforzándose ni dejando pasar el tiempo...pero seguramente sea eso lo que la haga realmente diferente.